¿Pueden proliferar bacterias en la máquina Dolce Gusto a causa de la leche?
No, no tenés que preocuparte por la proliferación de bacterias en tu cafetera NESCAFÉ Dolce Gusto. Esto se debe a que el proceso de preparación del café en estas máquinas no implica ningún contacto directo con la leche ni con otros ingredientes perecederos, lo que reduce significativamente las posibilidades de acumulación de bacterias en el interior del sistema.
El funcionamiento de tu máquina de café se basa en un diseño cerrado y eficiente. Al insertar una cápsula, una aguja perfora su membrana, permitiendo que el agua a alta presión ingrese a través de ella. Esta agua caliente atraviesa el café tostado contenido dentro de la cápsula, extrayendo su sabor y aroma para preparar tu bebida. Posteriormente, un disco de plástico interno ejerce la presión adecuada sobre la parte superior de la cápsula, empujando el papel de aluminio que la cubre. Gracias a este sistema cerrado, todo el proceso ocurre dentro de la cápsula, sin contacto directo entre la bebida y los componentes internos de la cafetera. Incluso cuando se utilizan cápsulas con leche en polvo, esta nunca entra en contacto directo con la máquina, ya que también se encuentra sellada dentro de la cápsula.
Por esta razón, tu cafetera NESCAFÉ Dolce Gusto está protegida frente a la formación de bacterias, ya que no se expone a residuos líquidos o materiales que favorezcan su crecimiento. Si te interesa conocer más sobre cómo están diseñadas nuestras cápsulas, podés ingresar a la sección Cápsulas Inteligentes en el apartado Acerca de Nosotros, donde se explica en detalle el sistema de funcionamiento y los materiales utilizados.
Lo único a lo que deberías prestarle atención, desde el punto de vista del mantenimiento, es a la limpieza ocasional del portacápsulas. Aunque esto no representa un riesgo higiénico directo, es recomendable limpiarlo periódicamente por cuestiones de apariencia y para conservar tu máquina en buen estado general.
Además, es importante seguir una pequeña recomendación de uso: una vez que termina la preparación del café, esperá a que la luz del botón deje de parpadear y que ya no caiga más líquido a la taza antes de retirar la cápsula usada. Este paso asegura que ya no hay presión dentro de la cápsula, lo que facilita su extracción y evita posibles derrames o salpicaduras.
En resumen, el diseño y el sistema de funcionamiento de tu NESCAFÉ Dolce Gusto están pensados para garantizar una experiencia segura, práctica y limpia, sin necesidad de preocuparte por la formación de bacterias durante su uso habitual
